Mucho se especuló sobre los alcances que tendría el nuevo Ministerio de Medio Ambiente. Ahora, que el proyecto de ley que lo crea es de conocimiento público (véalo aquí), y las dudas ha sido despejadas, comienza el periodo en que diversos personajes del mundo político, empresarial y académico están dando sus apreciaciones.
Uno de los puntos que ha llamado la atención es que en cada municipio se deberán crear unidades ambientales, con su presupuesto respectivo. El presidente de la Asociación de Municipalidades, Ángel Bozán, ha señalado que al menos se necesitarán 1.200 millones de pesos para solventar estas nuevas oficinas. A esto hay que sumarle la creación de otros servicios como los Seremis ambientales regionales, la subsecretaría ministerial, la superintendencia ambiental y el Servicio de Evaluación Ambiental, con sus respectivas direcciones regionales, entre otras entidades nuevas.
Este Servicio, será el encargado de administrar el actual Seia, la entrega de información, unificar criterios de calificación, administrar el registro de consultores calificados y otras labores detalladas en el documento que crea el Ministerio de Medio Ambiente.
Las Coremas tienen sus días contado, ya que la calificación de los proyectos estaría a cargo de una comisión presidida por el Seremi ambiental regional e integrada por los secretarios regionales de los ministerios de Economía, Obras Públicas, Transporte, Minería, Fomento, Planificación, Energía, Salud, Agricultura, Vivienda, entre otras entidades, además del director regional del Servicio de Evaluación.
Para el 2008 Conama cuenta con un presupuesto de 16 mil millones de pesos, pero aún no se sabe cuánto costará implementar la nueva institucionalidad propuesta.
Por otra parte, la Comisión de Recursos Naturales de la Cámara, que actualmente estudia el proyecto, ha encontrado “poca claridad respecto a las funciones” del ministerio, ya que hay atribuciones de la nueva secretaría que chocan con las que ya manejan otras entidades.
Muchos son los llamados a opinar sobre este proyecto de ley que crea el Ministerio de Medio Ambiente y la Superintendencia Ambiental. Todos en realidad podemos hacerlo.
¿Cuántos escollos deberá pasar este proyecto para que sea una realidad?
¿Qué opinas?
Uno de los puntos que ha llamado la atención es que en cada municipio se deberán crear unidades ambientales, con su presupuesto respectivo. El presidente de la Asociación de Municipalidades, Ángel Bozán, ha señalado que al menos se necesitarán 1.200 millones de pesos para solventar estas nuevas oficinas. A esto hay que sumarle la creación de otros servicios como los Seremis ambientales regionales, la subsecretaría ministerial, la superintendencia ambiental y el Servicio de Evaluación Ambiental, con sus respectivas direcciones regionales, entre otras entidades nuevas.
Este Servicio, será el encargado de administrar el actual Seia, la entrega de información, unificar criterios de calificación, administrar el registro de consultores calificados y otras labores detalladas en el documento que crea el Ministerio de Medio Ambiente.
Las Coremas tienen sus días contado, ya que la calificación de los proyectos estaría a cargo de una comisión presidida por el Seremi ambiental regional e integrada por los secretarios regionales de los ministerios de Economía, Obras Públicas, Transporte, Minería, Fomento, Planificación, Energía, Salud, Agricultura, Vivienda, entre otras entidades, además del director regional del Servicio de Evaluación.
Para el 2008 Conama cuenta con un presupuesto de 16 mil millones de pesos, pero aún no se sabe cuánto costará implementar la nueva institucionalidad propuesta.
Por otra parte, la Comisión de Recursos Naturales de la Cámara, que actualmente estudia el proyecto, ha encontrado “poca claridad respecto a las funciones” del ministerio, ya que hay atribuciones de la nueva secretaría que chocan con las que ya manejan otras entidades.
Muchos son los llamados a opinar sobre este proyecto de ley que crea el Ministerio de Medio Ambiente y la Superintendencia Ambiental. Todos en realidad podemos hacerlo.
¿Cuántos escollos deberá pasar este proyecto para que sea una realidad?
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